Deprimartes etéreo:
De la mano de T. Rex, soñemos que estamos en un mundo
mejor. Soñemos y soñemos, tal vez terminemos por alcanzar esos sueños: “Viaja como si fueras un pájaro por los caminos del cielo,
viaja como si fueras un ave. Vuela como un águila a través de un rayo de sol,
vuela como si fueras un ave”. En el hecho de soñar radica el balance que
nuestro cerebro le da a los sinsabores de la realidad. Es la dosis de alma que
nuestro inconsciente le inyecta a la vida.
Marc Bolan, el líder de T. Rex, literalmente creó el Glam Rock,
la evolución del Rock & Roll en los primeros años ’70, que consistía de una
terrible potencia rockera, letras con contenido épico, una puesta en escena
donde predominaba el uso de lentejuelas y de todo lo que brille, y una estética
ambigua desde lo sexual. Además, tocaba la guitarra como los dioses -llegó a participar
en grabaciones de la Electric Light Orchestra, nada menos; además de tocar con
Elton John, Ringo Starr y Tina Turner, entre otros-: “Atrapa
una estrella brillante y ponla sobre tu frente, pronuncia un par de hechizos y
todo estará resuelto. Consigue un gato negro y siéntalo sobre tu hombro, y para
la mañana siguiente ya serás todo un sabio”.
Verán en este viejísimo videoclip que él tiene muchos de
los comportamientos en escena que luego imitaron todas las estrellas que le
siguieron. También compuso hitazos, como su potentísimo “20th Century Rock” o su
archi-mega-híper conocidísimo “Get It On”, pero antes de morir en un trágico
accidente de autos sin haber cumplido treinta años –y eso que el pobre de Marc
le tenía tanto miedo a los autos que ni siquiera sabía manejar-, lo que más
hizo fue soñar y enseñar a soñar: “Usa un sombrero
de punta, como los druidas en los días antiguos, usa un sombrero de punta y una
toga tatuada. Monta sobre un cisne blanco, como hace la gente en los festivales
de mayo, y déjate el pelo largo, así nada podrá salir mal”. Sigamos
soñando, que para deprimirnos, ya está la realidad. Hasta siempre, querido Marc;
por aquí se extraña tu característico uso y abuso del vibrato caprino a la hora
de cantar. ¡Feliz Deprimartes!
Genial!!! Si hay algo que me gusta es soñar, en cualquiera de sus versiones, no podía ser pues de otro modo, esta entrada me encanta.
ResponderBorrarNo se el tiempo que hacía que no escuchaba esta canción, me encanta volver a escucharla después de leerte, ganan mucho los temas que tratas.
Feliz deprimartes soñador
Besos
La versión de estudio es un tanto más tranquila y reflexiva. Marc era un músico demasiado potente como para reproducirla de esa misma manera en vivo. Un genio. Gracias por tus palabras, querida Nuria.
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