martes, 21 de julio de 2015

Capítulo 128: “One Of Us”. Joan Osborn. (1995)





Deprimartes anhelante:



En una rambla veraniega, la gente se agolpa frente a las atracciones de un parque de diversiones. Una de ellas, muy curiosamente, invita a sacarse fotos personificando a Dios. Por sacrílega que nos parezca la idea, este videoclip nos invita a pensar que Dios puede ser cualquiera de nosotros. Pero he allí lo malo de la cuestión, porque al igual que cuando todos tenemos la culpa de algo; si Dios somos todos, entonces nadie lo es: “Si Dios tuviera un nombre, ¿cuál sería? ¿Y tú lo pronunciarías en su propia cara si estuvieras frente a Él en toda su gloria? ¿Qué le preguntarías si tuvieras sólo una pregunta para hacerle?”. Qué interesante… ¿Qué le preguntaríamos a Dios si tan sólo nos fuera permitida una única pregunta?…



Joan Osborn nos canta: “Y sí, Dios es grande. Sí, Dios es bueno. Sí, sí…”. No tenía razones para pensar distinto, ya que la vida le sonreía con este éxito. Esta cantante norteamericana cuenta con una voz de buena presencia, ideal para una canción testimonial como ésta. Y a pesar de su buena apariencia, y de esta canción de éxito, esta vocalista es otra de los tantísimos artistas del Rock que pueden enmarcarse en el fenómeno llamado “One Hit Wonder”; músicos que tuvieron un único suceso comercial –por lo general arrollador-, y que luego no volvieron a tener repercusión; abandonando así el mainstream musical. Algunos por decisión propia, y otros muy a su propio pesar.



“¿Qué pasaría si Dios fuese uno de nosotros? Sólo un vago más, como cualquiera de nosotros. Sólo un extraño en el autobús, tratando de volver a su casa”. En serio… ¿Qué pasaría si Dios fuera uno de nosotros? Viajando a nuestro lado en el autobús… ¿Qué pasaría si nos encontráramos con Él, en una situación totalmente rutinaria? Yo prefiero imaginármelo encorvado de cansancio, los ojos vidriosos y la mirada perdida. Tal vez, mordiéndose tristemente una uña, con el pensamiento en cualquier parte; sin lograr encontrar la respuesta a preguntas cómo: “¿Qué fue lo que hice?”, o más bien: “¿Dónde fue que me equivoqué?”... “¿Por qué creé a esta sarta de imbéciles que no saben amar?”: “Si Dios tuviera una cara, ¿a quién se parecería? ¿Y querrías verlo, si eso significase que tendrías que creer en cosas como el cielo, en Jesús, en los santos y en todos los profetas?”.



Personalmente, siempre he deseado con todo mi corazón que Dios exista. Así, cuando me lo encontrara, podría molerlo a golpes por todo el tiempo que me hizo perder… En fin… Por el momento, dejemos tranquila a esa idea abstracta, mientras intenta regresar a su hogar: “Está tratando de volver a su casa, se lo ve como un sagrado pordiosero. Subiendo de vuelta al cielo sin nadie que lo acompañe. Nadie nunca lo llama por teléfono, excepto tal vez el Papa desde Roma”. Este tema presenta un muy prominente solo de guitarra, que aquí suena como un elemento puro del Rock & Roll. Promediaban los años ’90 y el Rock, a través del Grunge y del Indie volvía a gobernar al mundo. Al oír esa guitarra me imagino a más de uno preguntándole “¿Adónde estuviste?”, y la guitarra respondiendo: “Nunca me fui, estúpido, tú estabas muy ocupado escuchando sintetizadores”… ¡Feliz Deprimartes!


No hay comentarios.:

Publicar un comentario